Es un hecho que habitamos un mundo que se transforma constantemente, y que requerimos adaptarnos para lograr la sobrevivencia. En esta era vivimos un fenómeno que es la digitalización, que representa no solo el presente sino el futuro. En donde reina la inmediatez, la conectividad entre millones de usuarios y en donde lo virtual y real está estrechamente unidos, al punto de que llega a ser difícil reconocer dónde empieza un plano y termina el otro.
El ámbito de la tecnología y el marketing no es la excepción, esto se nota por medio de millones de empresas vigentes alrededor del mundo desde hace algunos años han tenido que valerse de incorporar diversas tecnologías para hacerse notar y para que la experiencia de usuario de sus clientes sea lo más eficiente y satisfactoria posible.
Una de las principales estrategias para lograr esto es la digitalización de la empresa. De hecho, se dice que tanto las PYMES como empresas de mayor tamaño que han logrado la digitalización han aumentado su nivel de productividad (Economía Digital, 2021).
La RAE establece que la digitalización es la “acción y efecto de digitalizar”. Así mismo, menciona que digitalizar es “convertir o codificar en números dígitos datos o informaciones de carácter continuo, como una imagen fotográfica, un documento o un libro”.
Conchi Sancar, consultora en estrategia digital, menciona que este proceso implica “desde la forma en la que se ofrecen los productos y servicios, hasta la comunicación con empleados, clientes y proveedores”. Siempre en función de establecer un vínculo satisfactorio con los clientes.
Tres elementos que supone la digitalización de las empresas son los siguientes:
a) La preferencia por el teletrabajo
Si bien esta forma de trabajo se popularizó durante la pandemia por el COVID-19, corresponde a una forma óptima de realizar el trabajo en empresas que han optado por la digitalización. La posibilidad de tener más movilización, flexibilidad en los horarios y la reducción de costos, los cuales se han demostrado que no afecta productividad ni la calidad, sino que la aumenta.
b) La necesidad de ser activo en redes sociales
Como hemos mencionado la existencia individual y por lo tanto empresarial, ha trascendido los límites de lo real y la experiencia cara a cara, llegando a ser igualmente importante la interacción y la presencia a partir de las redes sociales. Por lo tanto, si alguien o algo no genera actividad en redes socialmente, difícilmente va a estar vigente a nivel de negocios.
c) Digitalizar el proceso de compra
A partir de un proceso ágil y seguro, los clientes tendrán la oportunidad de realizar compras desde la página web de la empresa, además de realizar el pago a través de su tarjeta de débito/crédito. Lo que hace que sea necesario brindarles esta oportunidad de una forma cuya experiencia de compra sea la mejor posible. En resumidas cuentas, la digitalización de la empresa es importante porque es parte de la transformación de la sociedad y porque se ha demostrado que genera más productividad y mejora los vínculos comerciales